Todavía no ha tomado posesión y ya ha armado el tiberio para darnos por saco. Otra que continúa diciendo las mismas sandeces que su predecesor, y digo diciendo, porque no creo que lo piense, a no ser que sea, además de malintencionada, una inculta con pocas luces, mas bien me inclino a pensar que lo hacen para alimentar la mente de pusilánimes que, mientras sientan aversión a los españoles, no pensarán en lo que sus gobernantes les hacen.

No tienen vergüenza, ni ella ni López Robador, ni algunos más por aquellas tierras del hemisferio sur. Esta no se apellida López, ni García, ni del Castillo, apellidos muy parecidos a Atahualpa, Amaru o Pachacútec, por poner algunos ejemplos, se llama Claudia, que se parece poco a Xochimitl o Tlayolotl, y se apellida Sheinbaum, que mire Vd. por donde, a mi me suena a alemán y teniendo en cuenta que por aquellos tiempos Alemania y España compartían rey, no sería descabellado pensar que, entre los pasajeros de las naves que partían hacia el nuevo mundo en busca de mejor vida, no solo se encontraría Jerónimo de Vergara, Gaspar de Carrión de los Condes, Domingo de Llerena, Agustín de Santiago de Calatrava, Rafael de Osuna, etc. etc., sino que también podría encontrarse algún Hans de Friburgo de Brisgovia y algún Klaus de Augsburgo, así que yo les recomendaría que acudieran a un nigromante para que convocara a sus antepasados y pedirles cuentas a ellos, no a mí, que no tengo constancia de que ninguno de mis tatarabuelos gozara de encomienda en Guanajuato o Zacatecas ni ejerciera el oficio de la espada en el nuevo mundo.

Poco se atreven a pedir cuentas a los gringos, que les robaron medio país hace ciento setenta años, no quinientos, cuando ya eran independientes, con un paseo militar, y digo yo que, puestos a reclamar, deberían empezar por lo más reciente, pero no lo harán, saben que la repuesta sería el consabido mensaje a toda la población estadounidense "recordad el Álamo", que reaccionaría al unísono como todos sabemos, no como aquí, que inmediatamente aparece toda la caterva conocida, aceptando la culpa, como los traidores que son.

Otro que adolece del mismo mal es Pedro, antecesor de la actual presidenta de Perú, otro que tocó los cataplines llamándose Pedro, apellidándose Castillo y para mas INRI, de segundo Terrones, que ya manda cojones, y que es raro que no haya piado aprovechando la ocasión. Esto me recuerda cuando, hace ya unos años, en un tertulia de barra donde había un peruano, nos salió con que los españoles teníamos que devolver a Perú el oro que nuestros antepasados habían robado y además, lejos de reconocer la más mínima aportación española a la civilización de Perú, presumía de que los españoles no aportaron nada allí donde ya eran maestros en todas las artes y las ciencias, que sus antepasados Incas, con el sistema de canalizaciones en Machu Picchu habían conseguido que el agua fluyera hacia arriba de motu propio, sin ninguna ayuda, cualquiera diría que conocían los inventos de Juanelo y las bombas eléctricas, pero no las necesitaban. A pesar de que todos los demás contertulios le decíamos que lo que no puede ser no puede ser, que la ley de la gravedad es universal, el persistió en sus afirmaciones, así que uno de los contertulios perdió la paciencia y le dijo: tú lo que eres es un capullo, que se ha creído, como lo tonto que eres, lo que te ha dicho el mismo que te contó que los españoles habían ido a América a robar el oro de los indios.

Que Claudia Sheinbaum no invita al Rey a su toma de posesión, pues mejor, así evitamos que se junte con malas compañías, con la flor y nata de los mandatarios más demócratas, venezolanos, cubanos, chinos, etc., y con los mejores ejemplares de la política española, Pisarello, que de paso evitará que Argentina se quede sin representante, Irene Montero, Colau, o sea, lo mejor de lo mejorcito, y que no se pagarán el viaje de su bolsillo, cuando no representan a nadie, solo a ellos mismos, lástima que no se queden allí para siempre, así el dinero estaría bien empleado. La mejor respuesta, ninguna, ni el más mínimo aprecio, ni siquiera la desaprobación de Pedro Sánchez, que esta vez, oh sorpresa, reacciona como español.

Dicen algunos que, las peticiones de Claudia Sheinbaum, Andrés Manuel López Obrado y Pedro Castillo, son tan ridículas como si ahora a algún español tontolhaba se le ocurriera decir que Italia debe pedir perdón porque los romanos esclavizaron nativos para trabajar en las minas, y devolver el oro que se llevaron de Las Médulas y la plata de Rio Tinto. No hombre no, aquí no somos como los mandamases mejicanos y peruanos, anda que no, pues no van a ir Irene Montero y Ada Colau a Méjico, y espera que no se presenten allí, sin previo aviso, Yolanda Diaz, Pablo Iglesias, Monedero, Echenique, Errejón o alguno más de la misma cáscara, y visto que vivimos el renacer de un nuevo siglo de las luces, molón y progresista, cualquier cosa puede pasar.

¿Es verdad, como publica THEOBJETIVE, que Edmundo González se ha reunido con Zapatero para agradecerle las gestiones que facilitaron su salida de Venezuela? No, eso no puede ser verdad, si lo fuera, lo dicho, pobre hombre, a no ser, hay que ver lo que imaginan algunas mentes calenturientas, que Edmundo fuera el candidato de Zapatero para reventar las elecciones venezolanas. Si tal cosa fuera verdad, que resucite John le Carré o algún colega viviente se aplique, que habría tomate suficiente para novela gorda, donde, puede que, cualquier coincidencia de la ficción con la realidad no sería pura coincidencia.

Joer con Milei, vaya discurso en la ONU, qué verdades dijo, qué bien las dijo y qué bien se le entiende, mira que me ha costado cambiar de opinión, me suscitaba muchas dudas y no le tragaba, pero ya me ha convencido, me cae bien. Otro que estuvo a la altura fue Bukele. Reconforta comprobar que, en América, de Rio Bravo para abajo, haya gobernantes tan valientes como ellos.