Un hombre y una mujer han sido detenidos en Cantabria acusados de robar objetos religiosos y dinero en 93 iglesias de las provincias de Cantabria, Asturias y Palencia, tras varios meses de investigación por parte de la Guardia Civil.

Los primeros robos se cometieron en diciembre de 2022 en varias iglesias de Cantabria; la mujer realizaba un estudio previo de los templos, que posteriormente eran asaltados a la fuerza por ambos, utilizando palanquetas, destornilladores, alicates e incluso un gato hidráulico, con los que además causaban daños de consideración.

Para perpetrar los robos, se desplazaban en diferentes vehículos y disponían además de un visor nocturno, ya que aprovechaban la oscuridad para llevarlos a cabo. Su principal objetivo era el dinero de los cepillos, aunque también se apoderaban de objetos que pudieran poner a la venta.

En uno de los robos, en el Santuario de Valvanuz en Cantabria, consiguieron sustraer cerca de 1.000 euros procedentes de los donativos del belén navideño. Posteriormente, fueron extendiendo su zona de actuación a las vecinas provincias de Asturias y Palencia.

Ante la sospecha de un aumento de los robos por parte de la pareja durante la celebración del Año Jubilar Lebaniego, con el aumento de peregrinos y donativos en las iglesias situadas a lo largo del camino, la Guardia Civil inició un dispositivo para detener a los delincuentes.

Como consecuencia, detectaron a la pareja en varias ocasiones en las cercanías de diferentes iglesias y en un operativo detuvieron al hombre, que portaba en el coche herramientas para cometer un nuevo robo.

A continuación, en el domicilio de ambos, se detuvo a la mujer y en el registro los agentes encontraron 140 objetos de las iglesias asaltadas, como esculturas, óleos, relicarios, pequeños cofres, llaves, instrumental de sonido o bases de madera tallada para los féretros.