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Clásico

Palencia recordará al obispo Fonseca en el V centenario de su muerte

Un programa de conferencias y actos culturales conmemorarán el legado material y cultural que dejó en la catedral

Palencia recordará al obispo Fonseca en el V centenario de su muerte
El obispo Fonseca pintado en la tabla central del retablo de la Virgen de la Compasión en la Catedral de Palencia
Xavi Ramos Pozo
Xavi Ramos Pozo
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Un programa de conferencias y actos culturales conmemorarán el quinto centenario de la muerte del obispo Juan Rodríguez de Fonseca (1451-1524), uno de los grandes mecenas de la catedral de Palencia.

Falleció el 4 de noviembre de 1524 en Burgos, tras haber sido obispo de Palencia entre 1505 y 1514, tiempo en el que se llevó a cabo el retablo de la capilla mayor de la catedral.

Como ha explicado el delegado diocesano de Patrimonio, José Luis Calvo, a él se debe además la construcción de los tramos de la nave central correspondientes al actual coro y trascoro donde campea su escudo en los pinjantes de las bóvedas, según EFE.

Impulsó también los retablos pétreos góticos de las naves de la Epístola y del Evangelio; el retablo tardogótico isabelino del trascoro con su filigrana en piedra; la escalera de bajada a la cripta de San Antolín; la sala capitular y parte del claustro; y sus escudos -tanto el familiar como el propio- figuran en numerosos rincones.

Aparte de las obras que financió, destacan los numerosos bienes muebles que regaló como el políptico de Joes von Kalcar, una pintura flamenca al óleo sobre tabla con los Siete Dolores de la Virgen, San Juan y la Piedad y con su único retrato conservado, ubicado en la pared del trascoro; los cuatro tapices llamados de la Salve, encargados por él en Bruselas; y otros cuatro tapices denominados de las Virtudes para la sala capitular y expuestos en la misma.

Fonseca fue el gran mecenas del gran retablo de la capilla mayor donde se ubicaron las tallas de Felipe Bigarny -encargadas anteriormente por su antecesor Fray Diego de Deza, en 1504- así como las tablas contratadas por él mismo al mejor pintor de los reinos de Castilla, Juan de Flandes, el 19 de diciembre de 1509.

Después de ser obispo de Palencia y abad de San Zoilo en Carrión de los Condes, fue nombrado arzobispo de Burgos en 1514, falleciendo en esta ciudad castellana en 1524. Fue enterrado en la iglesia de Coca (Segovia).

"La Catedral y la Diócesis de Palencia no pueden pasar por alto esta efeméride. Le deben mucho. Su memoria continúa entre nosotros como gran obispo mecenas y también como prelado que dejó huella convocando Sínodo y promoviendo la cultura", ha resumido Calvo.

Por todo ello desde el Cabildo se organizarán una serie de conferencias y actos culturales, el próximo enero, para poner en valor la figura y obra de este gran obispo de Palencia. EFE