logo

Los retos de las aves migratorias ante el cambio climático

Los cambios de temperatura, que también han afectado a la flora, han cambiado sus hábitats

imagen
Los retos de las aves migratorias ante el cambio climático
Laguna de la Nava
Xavi Ramos Pozo
Xavi Ramos Pozo
Lectura estimada: 3 min.

La Laguna de La Nava o los propios cultivos de cereal constituyen hábitats muy relevantes para las aves, algunas de ellas amenazadas. Lo que no es tan conocido es que la mitad de las especies amenazadas de esos hábitas son migratorias.

Así lo recoge el Libro Rojo de las Aves de España, un documento publicado por SEO Bird Life en 2021 y elaborado por científicos y expertos que analiza el estado global, al notificar un total de 90 especies de aves amenazadas con presencia en España.

Algo que obliga a tomar medidas de conservación, que deben estar coordinadas en diversos países e incluso continentes, afirma a Ical uno de los responsables de proyectos sobre humedales de SEO Bird Life, Mario Giménez.

"Podemos hacer por tener en buen estado de conservación la laguna palentina de La Nava para los ánsares, que es una zona que ha perdido importancia por desplazarse a otros lugares; o para el carricerín cejudo, muy amenazado y que cría en Bielorrusia y Polonia, pero migra por la zona mediterránea, con la provincia palentina como parada marcada, hasta llegar a África tropical; por eso, ese esfuerzo debe ser recíproco en otras zonas y humedales o será un fracaso", explica.

Más allá de los grandes humedales, se encuentran las lagunas de menor tamaño que son "vitales para la migración", porque las aves "necesitan parar y poder comer para seguir con su viaje". Es muy evidente en los pájaros pequeños, pero también otras más acuáticas más potentes, como las anátidas o las garzas, por lo que se ha detectado que todas estas especies están disminuyendo, añade.

Para un pajarito mosquitero, que pasa apenas diez gramos, y puede hacerse 5.000 kilómetros en su migración, encontrar "un seto con unas vallas es vital para su resistencia en el camino", algo que está desapareciendo al pasar muchas de las parcelas al sistema agrario.

Se ha perdido mucha vegetación y, por tanto, insectos, semillas y alimento para muchas aves, algunas tan comunes, como la golondrina, que están catalogadas como amenazadas.

CAMBIOS DE CICLOS

En el caso de la cigüeña, especie característica en Castilla y León, cada vez hay más ejemplares que se quedan en invierno en España y rechazan cruzar el estrecho para desplazarse a África, dado que el clima en sus zonas es bueno y encuentran recursos y alimento.

Una situación que también ocurre con rapaces como el águila calzada o el aguilucho cenizo, una especie migratoria muy representativa de la Comunidad, que pasa los inviernos en el continente africano, pero regresa a Castilla y León a nidificar a los sistemas agrarios y las estepas agrícolas, a partir de los campos de cereal.

Pero la nidificación en estos campos conlleva una problemática, relacionada y agravada por el clima, dado que "se apuesta por adelantar la cosecha, lo que implica que los pollos sigan estando en el nido en el momento en el que actúa la cosechadora".

"Esto, que les iba bien a los aguiluchos hace décadas, porque estaban acoplados al ciclo de cultivo de los cereales, ha empezado a desacoplarse por las nuevas prácticas agrícolas, aunque se trabaja con diversos voluntarios para salvar esta situación", afirma.

NUEVOS COMPORTAMIENTOS

Giménez relata que la casuística varía de unas especies a otras, pero asegura que el cambio climático sí que incide, porque hay especies de aves que "ya no migran tanto y otras en las que sus tiempos de partida se han desajustado y comienzan a llegar e irse antes", de ahí que el ciclo de las aves insectívoras "ya no coincida con los picos máximo de insectos", que es su mayor interés para alimentar a sus pollos.

Todo este tipo de comportamientos se comenzaron a ver desde hace tiempo y, en algunos casos, las especies "han conseguido adaptarse, pero otras son menos plásticas y les va a costar más este proceso", aclara.

Deja claro que, sin duda, se está ante un "momento cambiante", que se une a la sequía, agravada por la "mala gestión de la explotación más allá de la disponibilidad de agua", lo que afecta al estado de conservación de los humedales, así como a las especies que dependen de los cultivos.

0 Comentarios

* Los comentarios sin iniciar sesión estarán a la espera de aprobación
Mobile App
X

Descarga la app de Grupo Tribuna

y estarás más cerca de toda nuestra actualidad.

Mobile App